La comunidad de Hoyos fue el lugar en el que el EPAM concluyó el ciclo de animación misionera en las comunidades de la Parroquia.
El Equipo Parroquial de Animación Misión Misionera (EPAM), finalizó ayer el periodo de convivencias misioneras, las cuales ha venido desarrollando por todas las zonas que conforman la Parroquia, estas fueron realizadas con el objetivo de llevar entusiasmo y fortaleza a los animadores y miembros de las comunidades de fe en la Parroquia.
La convivencia con la cual fue clausurada esta etapa en el proceso evangelizador que impulsa el EPAM, fue realizada en la comunidad de hoyos y contó con la participación de las comunidades de Zamora, Hoyos, Inmaculada Concepción, y vistas abajo.
En el desarrollo de la convivencia, los miembros del EPAM, desarrollaron un tema que buscaba la motivación y participación de los fieles de manera más activa en las comunidades de fe. El tema fue desarrollado con una modalidad diferente, a manera de conversatorio, con el objetivo de mantener atención de los presentes.
La celebración eucarística de la jornada fue presidida por el Padre Oscar Hernández, quien destacó el valor que tiene el Espíritu Santo en el proceso evangelizador, subrayando que es el Paráclito el que asiste a todos aquellos que con fe, llevan la paz de Jesús a los necesitados.
“Nadie puede anunciar por su cuenta o por sus fuerzas el evangelio de Jesús, necesita de un defensor que le anime y le motive a llevar adelante esa tarea de anunciar el evangelio”, afirmo el sacerdote.
Con esta última convivencia el EPAM cumple uno de sus objetivos propuestos, que es llevar animo y entusiasmo a los participantes y responsables de las comunidades de fe de la Parroquia. De este modo se cierra un ciclo en el trabajo misionero que desarrolla este equipo.
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