Estamos a fin de año... Tiempo de cierre de actividades y evaluaciones. Tiempo de balance de los logros alcanzados y las necesidades que quedaron sin atender. Tiempo de agradecimiento por las semillas del Reino que crecieron en nosotros y tiempo de pedir perdón por omisiones y cansancios, por desánimos e incoherencias.
Tiempo de balance, también, del primer año de nuestro blog y de nuestro perfil de Facebook. Tiempo de hacer presente miedos superados, ilusiones alentadas, intentos que no pudieron ser, proyectos que quedaron por el camino... Tiempo de celebrar las ganas, el esfuerzo y el compromiso puestos en cada palabra, en cada foto, en cada nota, en cada decisión, para que expresaran con fidelidad el sentir de nuestra vivencia cristiana y el palpitar de nuestra Parroquia, en este tiempo, lleno de tantos desafíos.
Hoy, al concluir el año, siento que la idea original que se propuso se hizo realidad y tuvo una respuesta tan generosa, que hizo más fácil, y al mismo tiempo más desafiante, la tarea de ofrecer, una propuesta dinámica, actualizada, plural, "nuestra", capaz de aportar aquello que se necesitaba.
Guardo en estima las palabras de ánimo, las palmadas en los hombros, los gestos de asentimiento, la constancia y el cariño de quienes aprobaron y trabajaron. Y también las opiniones encontradas, los puntos de vista diferentes, las críticas, las sugerencias para mejorar... A quienes nos brindaron algo de todo esto, ¡muchas gracias!
Y a Uds., destinatarios permanentes del pensamiento y del esfuerzo de estos espacios, a los que lo difundieron, a los que supieron comprender y perdonar errores y carencias, a los que estuvieron de acuerdo y a quienes nos hicieron saber sus discrepancias... A todos, ¡muchas gracias!
Desde mi punto de vista les digo con mucha sinceridad que ha valido la pena. Ha valido la pena el iniciar este pequeño proyecto que nos acerca con tantos que están “lejos” y tantos que están “cerca”. No se ha hecho la gran cosa, pero si se ha hecho algo. Y no solamente se ha hecho sino que se ha puesto empeño y cariño en ello.
Ya mismo, estamos a comienzos de año y esto nos pone inevitablemente ante un nuevo comienzo. Espero que estén allí acompañando el dinamismo de la Parroquia a través de estos espacios que han sido creados, precisamente, para ustedes.
¡Feliz año 2012!
P. Roberto Escalante
Director del blog
0 comentarios:
Publicar un comentario